miércoles, 25 de mayo de 2016

El marqués va primero y tú te esperas!


Tengo un amigo en mi zona que se llama Carlos y está en la calle. Perdió su trabajo hace dos años y el paro se le acabó tras 12 meses. Siempre intento llevarle ropa y comida y en enero decidí llevarle pinchos y bebidas del restaurante José Luis. Me monté en un taxi en Atocha de camino a Paseo de la Habana y el taxista que parecía tener un buen día le dio por hablar más de la cuenta. Primero me dijo que vaya desgracia que su hermana hubiera decido adoptar un bebe negro de África y concluyó diciendo que si su hija mayor decidiera casarse con un negro para él sería no solo una decepción sino más bien un fracaso como padre y la toda la educación que ha invertido durante años para que su hija sepa distinguir el bien del mal. Yo no tenía palabras y con un gran sentimiento de tristeza pagué y me fui. Pero lo peor sucedió entrando por la puerta que veis en la foto cuando un señor mayor acompañado de una chica 40años más joven que él me empujó para entrar el antes que yo en el restaurante. Eso ya me llamó bastante la atención, pero por educación no mencioné ni una palabra y baje la cabeza. Llegué corriendo a la barra porque eran las 14:30h y yo sabía que Carlos estaría en mi zona sólo hasta las 3 de la tarde y no quería que se fuera sin su menú del día. Cuando llamé a la camarera, el señor mayor me gritó: "Pero niña, es que no sabes que yo soy el marqués xxxx y que ésta es mi casa y que todos los camareros me conocen?!!" El señor mayor se acercó a la camarera y elevando el tono le dijo: "Ya sabes que me atiendes a mí primero y luego a esta chica." Y la pobre camarera asintió con su cabeza. Yo me giré y le insistí que iba con mucha prisa y que me hiciera el favor de permitirme encargar la comida para llevar antes de que él pidiera..., pero no hubo suerte y el señor elevando la voz por tercera vez pidió un whisky y unGin  Tónic para su acompañante. 

2016 - Sucesos en Madrid - Racismo

Fundación Sanders formó parte de un evento en el Impact Hub en la zona del Barrio de las letras en Madrid el 11 de mayo con el grupo de Opeduca que vinieron desde los Países Bajos a España para cambiar la educación actual y hacer de los estudiantes jóvenes empresarios. Lo que sucedió fue que yo ese día tenía las defensas bajas por falta de sueño y tuve que retirarme antes de que el evento finalizara e irme a casa. El presidente de la fundación, de buena fé recogió todos los artículos del evento y de camino a verme, paró en un restaurante italiano en las calle de las Huertas para comprar una pizza para que yo comiera algo. Al entrar en el restaurante llevando consigo 3 paraguas del mismo color y Logo, uno de los camareros le dijo que se fuera a vender los paraguas a otro lado. El presidente de la fundación se llama Robert Sanders y es una persona America de color. Él dijo que no vendía nada, que iba a encargar algo de comer y la respuesta fue que como es negro se parece a los vendedores ambulantes y que en el restaurante no se puede vender paraguas. Con la cabeza baja, el pobre Robert tuvo que abandonar el local y cuando llamó a mi puerta simplemente me dijo: "Marta, te importa que pida comida por teléfono y que te la traigan? Es que me han confundido con vendedores ambulantes por ser negro y si no te importa prefiero encargar la comida para evitar malentendidos." 

Yo me puse como una furia, directa a ir al maldito italiano y cantarle las 40 por racista, pero Robert me frenó diciendo que no merecía la pena y que por favor olvidar dará el suceso. 

Hoy os narró aquí la historia, porque nuestra campaña de recaudación de fondos necesita el dinero para erradicar de una vez por todas el acoso escolar, el racismo y la xenofobia. El futuro de cada persona depende y empieza con la educación de los niños en el colegio, para prevenir males en el futuro y así por vivir en un mundo diferente, en un mundo mejor. 

Marta Guilabert
Visionaria 
El Futuro es Hoy!